Sin propósito de enmienda: Elogio de la mala hierba
Sábado, 16 de mayoVOLVER Y BULOSDespués de más de dos meses, por fin puedo volver a Avilés. Dejé de vivir allí de manera permanente en 1982, pero desde entonces raro es el fin de semana que no he...
View ArticleSin propósito de enmienda: Resurrección
Sábado, 23 de mayoEN EL PARCHELa felicidad es sentarse con dos amigos, esta mañana soleada, en una de las terrazas de la plaza del Ayuntamiento, que los avilesinos llamamos el Parche, muy cerca del...
View ArticleSin propósito de enmienda: Arrojado a los tiburones
Sábado, 30 de mayoOTRA HERIDA EN MI VANIDADLos profesores universitarios, cuando les llega la jubilación, pueden solicitar la condición de eméritos, que permite seguir vinculado a la institución dos...
View ArticleSin propósito de enmienda: Cahn, Zweig, Geiger
Sábado, 6 de junioVIENA, 1918Creo haber resuelto el enigma de Erich Sylvester, no el músico de ese nombre, sino el autor de dos recopilaciones sobre “la sabiduría de los pueblos antiguos” publicadas en...
View ArticleSin propósito de enmienda: Cumpleaños feliz
Sábado, 13 de junioESCUCHAR A LOS DEMONIOSHojeo el último libro de Pascal Quignard, La vida no es una biografía, y me encuentro con esta frase: “Uno debe escuchar con mucha atención a sus demonios”....
View ArticleSin propósito de enmienda: Autónomos y asalariados
Sábado, 20 de junioSI YO FUERA DIOSNo sé cómo a Dios, con ser Dios, no se le ocurre la manera de mejorar el mundo. Bastarían tres o cuatro medidas muy sencillas. La primera, eliminar enfermedades y...
View ArticleEl bazar de las sorpresas: Secretos y voces
LO QUE NUNCA DIJE A NADIETodos tenemos secretos que nos avergüenzan y que más pronto o más tarde acaban saliendo a la luz. Mi problema, si puede llamarse así, comenzó allá por 1971 o 1972. Yo había...
View ArticleEl bazar de las sorpresas: Toda la vida huyendo
EN EL MONASTERIODurante un tiempo creí que encontraría la felicidad lejos del mundo, refugiándome en una celda. Me habría gustado hacerlo en un monasterio de aire medieval, situado en una alta colina...
View ArticleEl bazar de las sorpresas: El miedo guarda la viña
AMAR LA VIDAEn el mercado de Arcachon, encuentro un vendedor de aforismos grabados en decorativos trozos de madera. Muchos son anónimos y parecen más bien banales frases de autoayuda, pero otros los...
View ArticleEl bazar de las sorpresas: El huevo de la serpiente
INCIDENTE EN SEVILLAMás que el miedo a los locos, que también, el miedo a volverse loco es uno de los terrores ancestrales de la humanidad. Lo sintió Pessoa, lo siento yo, quizá todo el mundo lo ha...
View ArticleEl bazar de las sorpresas: El amor y otras amenazas
EL MIEDO ES LIBREPor mi profesión, o afición, o como quiera que se llame, estoy acostumbrado a las amenazas. Más o menos desde 1975, desde que comencé a publicar Jugar con fuego, me he dedicado a...
View ArticleSosastris, Melquiades y el rey que rabió
Esta historia que os voy a contar ocurrió hace mucho, mucho tiempo, en un país remoto de cuyo nombre no quiero acordarme. En ese país había un rey, un burro y un niño. El rey era viejo, muy...
View ArticleUnas traducciones inéditas de Víctor Botas
En una librería de viejo de Bayona, cuyo nombre no puedo recordar ahora, pero sí que estaba muy cerca de la neoclásica sinagoga, encontré hace años una colección de epigramas, Saecli incommoda, en...
View ArticleEl bazar de las sorpresas: Los papeles de la abadía
UNAS CARTAS DE AMORHace algunos años participé en un encuentro de poetas franceses, portugueses y españoles en la abadía de Royaumont, en los alrededores de París. Un encuentro reducido, poco más de...
View ArticleEl bazar de las sorpresas: Este placer de alejarse
CUESTIÓN DE HIGIENEEn el escaparate de El escribano, una singular tienda leonesa dedicada al arte de la escritura medieval, veo un grabado en el que un escribiente le pregunta a otro: “Escribano,...
View ArticleEl bazar de las sorpresas: El desengaño en un sueño
Paso estos últimos días del verano en una cabaña encaramada en la ladera de una montaña, cerca del parque nacional de Redes. Estaba abandonada y tuvimos que acondicionarla en lo posible. Un mínimo...
View ArticleDespués y todavía: Para qué caemos
Martes, 1 de septiembreUN AMOR CORRESPONDIDOHay tres maneras de enamorarse. Existe el amor a primera vista, el que va apareciendo con el trato y el que llamaban los trovadores “amor de lejos”:...
View ArticleDespués y todavía: El ruedo ibérico
Domingo, 6 de septiembreCRIMEN PERFECTO“Estamos en Madrid y en septiembre de 1971. Los obreros de la construcción han decidido iniciar una huelga pidiendo mejoras económicas y laborales. Un hombre...
View ArticleDespués y todavía: El mercader de vísceras
Sábado, 12 de septiembre MEJOR ME CALLO En toda vida, incluso en una vida tan aburridamente previsible como la mía, hay algún secreto que no avergüenza y que daríamos cualquier cosa porque...
View ArticleDespués y todavía: Por qué soy tan insoportable
Sábado, 19 de septiembre. FELICIDADES Soy muy celoso de mi privacidad, pero comparto gustoso mi intimidad. La distinción entre ambas –en el lenguaje común suelen considerarse sinónimos-- la tomo de...
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